
El Gobierno avanza con una reforma que flexibiliza vacaciones, salarios y horarios. Detrás del discurso de “modernización”, el mileísmo recompone viejas reglas de los 90 y concede al capital una ventaja inédita.




La política hídrica y sanitaria de la administración de (Javier) Milei atraviesa un desplome histórico. Según datos oficiales, hasta agosto de 2025 la inversión nacional en agua potable y alcantarillado fue de apenas $58.157 millones, frente a los $1,2 billones ejecutados en el mismo período de 2023.
Actualidad14/09/2025
La caída real alcanza un 95,2% y golpea de lleno a un servicio esencial para la salud pública.
Si en el plano nacional el recorte es alarmante, en la provincia de Buenos Aires el panorama directamente roza lo escandaloso: sólo se destinaron alrededor de $300 millones, un 99,9% menos que en 2023. En un distrito donde la urbanización y la densidad poblacional exigen una planificación sostenida, semejante desplome implica dejar a millones de bonaerenses expuestos a servicios deficientes y riesgos sanitarios.
La baja inversión, señalan desde la de lleno en la ejecución de proyectos. Durante la gestión de Alberto Fernández se iniciaron 2.540 obras vinculadas a agua y cloacas, de las cuales el 62,4% fueron completadas. Milei, en cambio, apenas puso en marcha dos: una finalizada en Concordia y otra, en San Justo, que permanece paralizada.
Peor aún, las 855 obras heredadas quedaron en un limbo: el 79,7% presenta menos del 10% de avance respecto a 2023. En territorio bonaerense, de 444 obras recibidas, sólo 46 se concluyeron y más del 85% están prácticamente detenidas.
La magnitud del ajuste evidencia que no se trata de un simple problema de gestión, sino de una decisión política: priorizar otros gastos sobre la infraestructura básica. Para igualar la inversión de 2023, el Gobierno debería destinar hasta fin de año $1,9 billones, mientras que en Buenos Aires harían falta $879 mil millones adicionales.
El Censo 2022 había mostrado avances históricos en el Conurbano: el 87,4% de las viviendas contaba con baño con inodoro y el 57,8% estaba conectada a la red cloacal. La parálisis actual amenaza con frenar esa expansión y poner en riesgo el mantenimiento de lo ya construido.
Mientras el Gobierno insiste en discursos de eficiencia y motosierra, la realidad de los barrios muestra caños oxidados, cloacas colapsadas y familias que vuelven a depender de camiones cisterna o pozos ciegos. El saneamiento, que debería ser prioridad, se diluye definitivamente.

El Gobierno avanza con una reforma que flexibiliza vacaciones, salarios y horarios. Detrás del discurso de “modernización”, el mileísmo recompone viejas reglas de los 90 y concede al capital una ventaja inédita.

Tras un año de reclamos, el Ejecutivo otorgó incrementos del 29 al 35% que se cobrarán recién entre marzo y abril. Las organizaciones advierten que el Gobierno sigue actuando fuera de la ley y que los aumentos no cubren ni los costos básicos del sector.

Con salarios licuados, tarifas impagables y precios que no ceden, casi la mitad de los argentinos usa crédito para comprar alimentos. El endeudamiento dejó de ser una decisión de consumo y se volvió una política social de hecho: la deuda cotidiana como salario encubierto.

El contundente triunfo electoral de Javier Milei consolida un hecho que ya trasciende las fronteras argentinas: el liberalismo ha vuelto a ocupar el centro de la escena política regional.

El resultado de las elecciones legislativas nacionales generó un fuerte impacto positivo en los mercados financieros. Tras confirmarse la victoria del Gobierno, las acciones argentinas que cotizan en Wall Street registraron subas históricas, los bonos soberanos repuntaron y el dólar mostró una marcada baja tanto en el mercado oficial como en el paralelo.

La reciente victoria electoral de Javier Milei ha fortalecido su posición en el Congreso, lo que le otorga una oportunidad clave para avanzar en la reforma laboral que propone. La composición del nuevo Parlamento, con una mayor representación de La Libertad Avanza (LLA), facilita la posibilidad de aprobar proyectos que buscan modernizar el régimen laboral argentino.

Mientras Estados Unidos y China negocian un acuerdo histórico, Donald Trump apostó su capital político y financiero a Javier Milei. El respaldo del republicano estabilizó la economía argentina y selló una alianza que no es ideológica, sino estratégica: recursos, Antártida y control del Atlántico Sur.

Una serie de fábricas molineras han decidido suspender la entrega de harina a las panaderías hasta el próximo lunes. Las razones aducidas apuntan a la incertidumbre económica, falta de precios definidos y presión cambiaria.

Al conmemorarse el 90° aniversario del nacimiento del ex intendente Oscar Sánchez, detenido y desaparecido durante la última dictadura cívico-militar, este martes se realizó un sentido homenaje en la Escuela N°2 de nuestra ciudad, institución que lleva su nombre.

Con el mandato de Máximo Kirchner próximo a vencer, el peronismo provincial se enfrenta a una encrucijada: renovar, confrontar o consensuar. La vicegobernadora emerge como figura de unidad entre tensiones internas.

Con salarios licuados, tarifas impagables y precios que no ceden, casi la mitad de los argentinos usa crédito para comprar alimentos. El endeudamiento dejó de ser una decisión de consumo y se volvió una política social de hecho: la deuda cotidiana como salario encubierto.

Tras un año de reclamos, el Ejecutivo otorgó incrementos del 29 al 35% que se cobrarán recién entre marzo y abril. Las organizaciones advierten que el Gobierno sigue actuando fuera de la ley y que los aumentos no cubren ni los costos básicos del sector.

El Gobierno avanza con una reforma que flexibiliza vacaciones, salarios y horarios. Detrás del discurso de “modernización”, el mileísmo recompone viejas reglas de los 90 y concede al capital una ventaja inédita.